2 Tesalonicenses 2 - La Biblia de las Américas

Libro de 2 Tesalonicenses
Capitulos:

123

1 - Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo y a nuestra reunión con El, os rogamos, hermanos,

2 - que no seáis sacudidos fácilmente en vuestro modo de pensar, ni os alarméis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como {cf15I si fuera} de nosotros, en el sentido de que el día del Señor ha llegado.

3 - Que nadie os engañe en ninguna manera, porque {cf15I no vendrá} sin que primero venga la apostasía y sea revelado el hombre de pecado, el hijo de perdición,

4 - el cual se opone y se exalta sobre todo lo que se llama dios o {cf15I es} objeto de culto, de manera que se sienta en el templo de Dios, presentándose como si fuera Dios.

5 - ¿No os acordáis de que cuando yo estaba todavía con vosotros os decía esto?

6 - Y vosotros sabéis lo que lo detiene {cf15I por} ahora, para ser revelado a su {cf15I debido} tiempo.

7 - Porque el misterio de la iniquidad ya está en acción, sólo {cf15I que} aquel que {cf15I por} ahora lo detiene, {cf15I lo hará} hasta que él mismo sea quitado de en medio.

8 - Y entonces será revelado ese inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida;

9 - {cf15I inicuo} cuya venida es conforme a la actividad de Satanás, con todo poder y señales y prodigios mentirosos,

10 - y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, porque no recibieron el amor de la verdad para ser salvos.

11 - Por esto Dios les enviará un poder engañoso, para que crean en la mentira,

12 - a fin de que sean juzgados todos los que no creyeron en la verdad sino que se complacieron en la iniquidad.

13 - Pero nosotros siempre tenemos que dar gracias a Dios por vosotros, hermanos amados por el Señor, porque Dios os ha escogido desde el principio para salvación mediante la santificación por el Espíritu y la fe en la verdad.

14 - Y fue para esto que El os llamó mediante nuestro evangelio, para que alcancéis la gloria de nuestro Señor Jesucristo.

15 - Así que, hermanos, estad firmes y conservad las doctrinas que os fueron enseñadas, ya de palabra, ya por carta nuestra.

16 - Y que nuestro Señor Jesucristo mismo, y Dios nuestro Padre, que nos amó y nos dio consuelo eterno y buena esperanza por gracia,

17 - consuele vuestros corazones y {cf15I os} afirme en toda obra y palabra buena.